Santafixie nació en Barcelona y actualmente opera en Países Bajos, Reino Unido, Alemania y Dinamarca. Tienen marca propia de bicicletas, fabrican ruedas y su negocio se basa en el comercio online.
Juan Pablo Alberca, más conocido como Txampa, es ingeniero informático de sistemas y en 2011 ayudó a Xavier Clavería a diseñar una web para que pudiese vender en España las 30 bicicletas que había comprado en la tienda de Londres Hackney Cycles.
En el momento en el que se vendieron todas las bicicletas, Txampa, quien actualmente es el cofundador y CEO de Santafixie, decidió adentrarse en este negocio.
“Empezamos a trabajar desde casa, sin oficina y en los almacenes que alquilábamos teníamos guardados algunos componentes y bicicletas”, asegura el CEO.
Ruedas a la carta
Santafixie comenzó con un modelo de bicicleta, pero estaba disponible en tres colores diferentes y se especializaron en la fabricación de ruedas.
“Más adelante nos trasladamos a un local y contratamos a nuestro primer mecánico para fabricar ruedas a mano. Es algo que a día de hoy seguimos haciendo y así ofrecemos un producto personalizado en Internet que nadie tiene”.
Un año después, en 2012, abrieron la página web de Santafixie Francia dado el éxito que estaban teniendo los productos en dicho país, sin olvidar que actualmente sigue siendo su principal mercado.
Y a partir de ese momento, también se lanzaron con Países Bajos, Italia, Reino Unido y Dinamarca.
“Tenemos página web y newsletter traducidas a cada idioma y contratamos a personal para atender a los clientes de dichos países”.
En 2017 lanzan su marca propia de bicicletas
Santafixie lanza en 2017 su propia marca de bicicletas. “Desde 2017 hasta ahora hemos mejorado en el control de stock y de calidad y ahora pintamos en Portugal en vez de en Asia”, explica Txampa.
Sus proveedores de Asia o Rotterdam envían los cuadros puros sin ningún tipo de tratamiento a Portugal para pintarlos, “casi a demanda del cliente”.
Según Txampa, lo hacen para asegurarse “de no tener mucho stock aquí, pero tener el suficiente para que esté disponible en casi todas las tallas y colores”.
La diferencia con los comienzos es que ahora, cuando los cuadros llegan pintados de Portugal, ofrecen a los clientes la rueda completa, sin necesidad de que tengan que montar nada, solo hincharla.
Desde Santafixie aseguran que el objetivo es facilitar a los usuarios la compra de una rueda, sin falta de que tengan que mirar también cámaras y cubiertas.
“Mucha gente compra la rueda y después busca una cámara y una cubierta. Tienen que ir a otras secciones de la web para adquirirlas y a veces la gente no sabe qué cámara o cubierta le corresponde, ya que las ruedas son de distintos perfiles. Nosotros ofrecemos la rueda completa y les facilitamos el proceso”, explica el CEO.
Modelos Raval y Born
En Santafixie cuentan con los modelos de bicicleta Raval y Born, siendo posible elegir alguna configuración como el tamaño de las ruedas o el tipo de manillar. Además, trabajan con otros 90 modelos de diferentes marcas.
Modelo Raval.
El tiempo estimado de entrega son 3 o 4 días y en Santafixie tienen claro que si diseñan algo nuevo y lo mandan a fabricar, no lo anuncian ni lo ponen a la venta.
“No se le puede asegurar a los clientes algo que no tienes, no me parece lícito ni honesto comprometerse con alguien a que te compre una cosa y no sabes ni si te va a llegar a ti”.
Esto se debe a que la pandemia ha ralentizado los procesos y algunas marcas les daban “12 o 13 meses para que llegasen los productos”.
Retos y objetivos
Santafixie está trabajando para tener más presencia en los puntos de venta físicos. Es decir, quieren facilitar y potenciar el canal online teniendo unidades en diversas tiendas físicas para que la gente pueda ver las bicicletas y después quiera comprarlas en Internet.
“Creo que es importante y por ello estamos trabajando en una red de tiendas y agentes comerciales para abrir más canales y así estar más presentes y conseguir más visibilidad”, expone el CEO.
Como objetivos, Txampa asegura a C de Comunicación que le gustaría abrir más mercados en Europa, pero sobre todo, su meta está en Estados Unidos.
“Tenemos identificado el mercado y competidores de Estados Unidos y lo ideal sería conseguir más poder económico para replicar lo que hacemos. Nos gustaría formar un equipo de 5 personas para que trabajen allí, ese sería nuestro objetivo”, explica.