AURUM ha lanzado las nuevas 'Racing Red' y 'Polar White', con las que completa su gama de Essentia. Esta gama ya cuenta con cuatro opciones diferentes de pintura para montajes con Shimano Ultegra Di2 o Sram Force AXS.
El modelo Essentia de AURUM completa su catálogo con dos nuevos acabados: Racing Red, con la base del kit cuadro en rojo, inspirado en tonos muy deportivos y de competición y la Polar White, dando todo el protagonismo al color blanco. Además, con el lanzamiento de ésta última, la compañía quiere dar visibilidad al problema que supone el calentamiento global y, como consecuencia, el deshielo de los polos.
Con la llegada de estas dos nuevas opciones Essentia dispone de cuatro colores distintos para elegir, sumando estas dos novedades a las ya conocidas Cyan Blue y Stone Grey.
Tanto la Racing Red, como la Polar White mantienen la parte superior del tubo horizontal del cuadro, el interior de horquilla y vainas en negro. Por otro lado, el acabado final de pintura en brillo facilita el mantenimiento y evita adherencia de polvo y suciedad.
Essentia Polar White y el deshielo de los polos
Desde AURUM explican que quieren aprovechar el lanzamiento de Essentia Polar White para dar visibilidad al problema que supone el calentamiento global y, como consecuencia, el deshielo de los polos.
La principal razón por la que los polos del planeta enfrían no es porque estén helados, enfrían sobre todo porque son blancos. Ese blanco refleja la cantidad justa de energía solar de regreso al espacio. Que los polos sigan siendo blancos es vital para la humanidad.
Este efecto de enfriamiento ha sido fundamental para mantener estable la temperatura de la Tierra. Los hielos marinos del Ártico están perdiendo masa a velocidades récord, exponiendo la superficie oceánica. El problema reside en que mientras el hielo refleja el 90 % del calor del Sol, el agua solo refleja el 20 % y el 80 % es absorbido, elevando sus temperaturas, lo que hace que también se expanda.
La combinación del hielo que se derrite y el agua que se expande está haciendo que se eleve el nivel del mar, lo que representa una amenaza para las ciudades costeras, entre ellas varias de las capitales del mundo.