Cristina Llorente asumió hace unos meses el cargo de coordinadora general de ConBici, una organización española dedicada a fomentar el uso de la bicicleta como un medio de transporte prioritario, seguro y ecológico. En una entrevista con este medio, nos revela los proyectos actuales en los que está trabajando ConBici.
Cristina Llorente, coordinadora general de ConBici, ha dedicado gran parte de su vida a la promoción y defensa del uso de la bicicleta. Originaria de Vitoria, ha estado vinculada a la Asociación de Usuarios de la Bicicleta de Vitoria (Gasteizko Bizikleteroak), durante muchos años.
Su compromiso con la causa la llevó a asumir la coordinación del área de legislación de ConBici hace unos años. “Me parecía muy importante dar una renovación de las leyes en relación a la gestión de bicicletas, los derechos o las señales, ya que algunas están obsoletas”, comenta.
Durante dos o tres años, Cristina trabajó hasta que tuvo que dejarlo por motivos personales. Sin embargo, con su reciente jubilación, ha vuelto con más energía y tiempo para dedicar a ConBici, esta vez como coordinadora general en sustitución de Gemma Simón i Mas.
Como coordinadora general, Cristina tiene la tarea de dirigir, tanto a los trabajadores contratados por proyectos como a los voluntarios. “Tenemos un coordinador para cada área, pero a veces hay cuestiones que se deben organizar entre todos. Hacemos reuniones periódicas para ver cuáles son nuestros objetivos de este año y también los de a medio y largo plazo”, explica.
“ConBici Herramienta Climática”
Cristina menciona que uno de los proyectos más destacados y a los que más esfuerzos dedica actualmente ConBici es “ConBici Herramienta Climática“. Se trata de un proyecto integral que promueve el uso de la bicicleta como medio de transporte sostenible.
Además, abarca aspectos sociales, ambientales y económicos, buscando fomentar el uso de la bicicleta, promover políticas públicas efectivas y concienciar sobre la movilidad sostenible. El proyecto tiene cuatro pilares fundamentales:
- Cycling with Clean Air: Una iniciativa europea para recoger datos sobre la contaminación del aire a través de voluntarios que circulan en bicicleta con dispositivos de medición para analizar los índices de contaminación del aire en áreas urbanas. “Queremos visibilizar que hace falta algún cambio, porque la contaminación atmosférica es muy dañina”, comenta Cristina.
- Conbici Ni un Paso Atrás: Este proyecto denuncia el mal uso de los fondos de la Unión Europea destinados a la movilidad ciclista, ya que en algunos municipios se están desmantelando iniciativas por cuestiones políticas. “Queremos impulsar el desarrollo de infraestructura ciclista para ciudades más sostenibles y seguras, pero también detectar las acciones de retroceso”, añade.
- Las Cuentas de la Bicicleta II: Un informe que analiza la incidencia de la bicicleta en la labor política y los datos económicos relacionados. “Está enfocado no solo al cicloturismo, sino también a la ciclo logística”, destaca.
- Una BiciMás: Un proyecto de formación y sensibilización respaldado por la DGT que busca promover el uso diario de la bicicleta. “Queremos que esto sea algo que esté dentro del currículo escolar”, subraya.
Proyectos futuros y visión a largo plazo
Respecto a los proyectos futuros en los que ConBici está trabajando, la coordinadora general destaca la publicación del informe “Movilidad ciclista y género“, realizado en colaboración con el colectivo feminista Col·lectiu Punt 6, que se ha lanzado a través del Instituto de las Mujeres.
Este informe destaca las desigualdades de género en el uso de la bicicleta, proporcionando una base sólida para futuras políticas públicas y mejoras en la infraestructura ciclista.
Además, ConBici coordinará el proyecto “Pedalea España”, una iniciativa destinada a desarrollar y promover el cicloturismo a nivel estatal. Este proyecto cuenta con la colaboración de diversas empresas del sector, como Vía y Tierra, SmartOs, Centro Cicloturista Subbética o Bike Friendly entre otras.
“Pedalea España no solo busca visibilizar y organizar la oferta de cicloturismo en un portal único, sino también coordinar y mejorar la red cicloturista nacional, conectando las rutas existentes en las distintas comunidades autónomas para crear una red coherente y accesible”.
Cristina Llorente, coordinadora general de ConBici
Cristina también aborda la importancia de la legislación y la gobernanza en el impulso del uso de la bicicleta. “Tenemos unas cuantas leyes con necesidad urgente de modificación, la más importante es la Ley de Movilidad Sostenible“, señala. ConBici ha presentado numerosas alegaciones para mejorar esta ley y otras relacionadas, pero la entrevistada apunta que “aún queda mucho trabajo por hacer”.
Mirando hacia el futuro, Cristina sueña con un escenario en el que ConBici sea innecesaria. “Nos gustaría que no sea necesario nuestro trabajo de impulso de la bicicleta. Esto sería porque ya todo el mundo circula en bicicleta, son ciudades seguras, los coches son solo para lo imprescindible”, explica. Sin embargo, asume que esto es un ideal para el que queda mucho camino para llegar.
“Las ciudades están llenas de coches y la contaminación es dañina”
Cristina compartió su perspectiva sobre el sector de la bicicleta en general, destacando que cada vez más personas son conscientes de la necesidad de un cambio de paradigma en las ciudades.
“Las ciudades están llenas de coches y la contaminación es dañina. Hay padres y madres jóvenes que reclaman más seguridad en los entornos escolares y más espacios verdes. Hay un auge del cicloturismo y una conciencia sobre la necesidad de un turismo sostenible. También hay una parte regresiva de la sociedad, pero es necesario revertir el uso del coche privado.”
Cristina Llorente, coordinadora general de ConBici
Sin embargo, Cristina reconoce que aún queda una parte de la sociedad que se resiste al cambio. Comparando nuestra situación con Europa, admite que España está quedándose atrás. “En Francia, con voluntad política y ciudadana, han conseguido un incremento brutal de la circulación en bicicleta. Aquí en España, estamos viendo una reversión absoluta en ciudades como Madrid”, lamenta.