Antonio del Pino y José Ángel Calabuig fabrican en A Coruña bicicletas de titanio de alto rendimiento. Un periodista y un arquitecto que apenas se conocían, pero que compartían su pasión por la bicicleta, decidieron hace aproximadamente 5 años sumergirse en una aventura que a día de hoy se ha convertido en su proyecto de vida, tal y como lo relata a este medio uno de los fundadores, Antonio del Pino.
La vida profesional de Antonio del Pino ha estado ligada siempre a la comunicación y ha trabajado en diversos medios como Motor Press, BIKE, Sportlife o Ciclismo a Fondo, incluso llegó a fundar una revista dedicada al Triatlón, aunque se dio cuenta de que lo que realmente le gustaba era el desarrollo de producto. Un día decide dar un giro a su vida y aunque parezca mentira, el mismo día que se despide de su trabajo, recibe una llamada de José Ángel con una propuesta.
En esa llamada, José Ángel, quien también fundó Xclusive Bikes, una distribuidora de productos de élite del sector de la bicicleta, y que además ya producía bicicletas con fibra de carbono, le pide que pruebe un cuadro de titanio que había fabricado.
“Equipé la bicicleta con su cuadro y quedó muy chula, aunque tenía algún fallo. Le pedí a José Ángel que la corrigiese y me la volvió a enviar a la semana siguiente, a pesar de que el titanio es un material difícil de tratar una vez que le das forma. En ese momento me di cuenta de que podríamos fabricar en serie”
Antonio del Pino
Con un proyecto en mente, los dos aficionados se ponen manos a la obra y fabrican 4 bicicletas de titanio y una de carbono con las que viajaron hasta Bristol (Reino Unido) para participar en una feria de fabricantes artesanales. En dicha feria, ganaron multitud de premios y notaron el interés de los asistentes por su novedoso producto. En ese momento se convierten en socios y se empieza a consolidar la marca Angel Cycle Works.
Angel Cycle Works
Para Antonio del Pino, uno de los fundadores, “ahora es cuando la marca empieza a ser una realidad”. Su autenticidad y visión original les ha llevado a fabricar 100 bicicletas completas y muchos cuadros que han comercializado tanto en España como fuera de nuestras fronteras. Eso sí, siempre con un trato completamente personal.
“De las 100 bicicletas que hemos vendido, sé con nombre y apellidos a quién corresponde cada una. A menudo vienen los clientes hasta A Coruña para conocernos y recoger la bicicleta, ha venido gente hasta de Suiza. Somos de las pocas empresas en las que los mismos que fabrican el producto te atienden por teléfono si tienes algún problema y queremos mantener este trato personal”
Antonio del Pino
Actualmente componen la empresa los dos socios y un empleador que ejerce la función de soldador y, desde los inicios, todo los beneficios de las ventas los han redirigido a I+D. Utilizan impresoras 3D y constantemente están pensando en innovar. Cabe destacar que todo el proceso de fabricación: diseño, impresión, soldadura y pintura se realiza íntegramente en España.
Actualmente cuentan con su modelo HEAVEN, válida tanto para su uso en carretera, como para la práctica de un ‘Soft Gravel’. Del Pino nos adelanta que próximamente presentarán su nueva bicicleta de gravel en la tienda ‘Gravel planet’ de Barcelona, con la que han establecido un acuerdo. También colaboran con la cadena de tiendas madrileña Sanferbike.
“Las bicicletas de titanio son mucho más resistentes. Nosotros fabricamos bicicletas que sean heredables. Hasta el momento no se ha roto ninguna bicicleta y ofrecemos garantía de por vida”.
Antonio del Pino
“Siempre trataremos de mejorar el producto”
Del Pino asegura que sus bicicletas están dentro del TOP 5 de mejores bicicletas de titanio a nivel mundial y su objetivo principal es continuar mejorando su producto.
“2023 es un año que ha empezado muy bien a nivel de interés y ventas. Somos dos colgados que hacemos bicicletas de titanio con soluciones muy innovadoras. Lo que ganemos será siempre para conseguir que las bicicletas sean mejores”.
Antonio del Pino
Del Pino asegura a este medio que tanto él, como su socio José Ángel Calabuig, creen “profundamente en el titanio” y aunque ya entregan las bicicletas a sus clientes en 8 semanas, están trabajando para reducir ese tiempo.
“Hemos nacido para fabricar bicicletas, pero bicicletas con alma, con significado”.