Velodrom, un espacio ciclista que busca diferenciarse de la tienda convencional

Cuando se entra a Velodrom, no se encuentra el típico establecimiento que vende bicicletas y accesorios. “No somos una tienda de bicicletas, somos un espacio ciclista, que no es lo mismo y para nosotros la parte intangible es muy importante”. Así define dicho negocio David Mateu, uno de los fundadores de Velodrom. 

Este ‘espacio’ nació hace 9 años y tienen su local centrado en gravel y carretera tanto en Barcelona como en Girona, aunque el objetivo para finales de verano es abrir Velodrom en Bilbao. Por otro lado, cuentan con franquicias en los países de Ecuador y Polonia. 

“Mi sueño es tener la mejor tienda concepto ciclista del mundo en Girona”, admite Mateu a C de Comunicación.A pesar de contar con un amplio espacio de venta, Velodrom prefiere tener espacios dedicados a las conversaciones entre los profesionales que atienden el punto de venta y su clientes y visitantes para conocerlos y ofrecerles un servicio totalmente personalizado, aunque eso implique tener menos productos a la vista. “Para nosotros Velodrom es un espacio comunitario”. 

Además, asegura que han tenido pedidos desde diferentes partes del mundo como Hong Kong, Australia, Singapur, Malasia, Estados Unidos o Canadá.

Especialistas en Bike Fitting

Empezaron su andadura en el mundo de la bicicleta con estudios biomecánicos (bike fitting) y pronto quisieron diferenciarse del resto de competidores. “Queríamos hacernos un hueco en este mercado, pero ofreciendo algo que no tuviese nadie. Creímos que la ropa era un producto que no estaba explotado ni le habían dado el suficiente valor y apostamos por ello”, explica Mateu. 

Desde ese momento, Velodrom trabaja con marcas como Pas Normal Studios, Rapha, Café du Cycliste, Maap, Ndlss o Velocio. 

Velodrom Barcelona ofrece además del servicio Bike Fitting, fisioterapia ciclista, alquiler de bicicleta y taller. 

Objetivo: vender todo con su propia marca

Mateu nos confiesa que su objetivo de aquí a tres años sería poder vender todo con su marca propia. “Queremos que nuestra marca esté al mismo nivel que el de nuestros partners”. 

Para Velodrom también es importante todo lo relacionado con la comunicación y las nuevas tecnologías, donde el comercio online supone un 20% del volumen de su facturación. 

Mateu también nos explica que, sin sumar la cifra de negocio de los servicios de taller, Velodrom Barcelona ha cerrado el ejercicio fiscal de 2021 con casi tres millones de euros.