Está claro que no se puede generalizar, ya que en algunas ciudades españolas como Valencia o Vitoria, el uso de las bicicletas urbanas es una realidad imparable. Pero, ¿por qué en otras muchas no lo es?
Alguien puede pensar que en una ciudad como Valencia, el clima ayuda, pues es mucho más amigable para la bici que en otras ciudades del norte, donde el frío y la lluvia es más frecuente, o del sur, donde el calor extremo a veces hace casi imposible hacer deporte. Pero si mis conocimientos de geografía no me fallan, Vitoria está en el norte y Málaga en el sur, y en ambas, el uso de la bicicleta crece cada año.
La orografía también es otro factor a tener en cuenta, pero con la llegada masiva de las Ebikes, el problema de “las cuestas” desaparece por completo. Además, si te gusta pedalear y hacer algo de ejercicio a la vez que usas la bici como solución de movilidad urbana, hasta te puede llegar a gustar el hecho de tener que forzarte un poco.
Más factores
La cultura ciclista es otro de los factores. Hay ciudades donde el uso de la bici está mucho más aceptado y generalizado que en otras tradicionalmente mucho más orientadas al coche, como por ejemplo Madrid, que además cuenta con una gran extensión.
El precio de las bicis no parece un serio obstáculo, pues la oferta es enorme, hay bicis para todos los bolsillos, y hasta un amplio mercado de bicis de segunda mano. Es cierto que las Ebikes urbanas tienen bajo mi modesto punto de vista un precio muy superior a lo que un usuario no ciclista está dispuesto a aceptar, si es para una solución de movilidad, pero eso es tema para otro artículo…
El alquiler de bicis podría ser otra variable más a tener en cuenta, pero hoy en día, yo diría que todas las grandes capitales de España disponen de un servicio de alquiler de bicis bastante amplio, fácil y económico.
¿Cuál es el problema de fondo? Sencillamente 2
De nada sirve que todas las variables mencionadas anteriormente dejen de ser un obstáculo si llegados a la cruda realidad, fallan estos 2 aspectos clave: los carriles desagregados y un lugar seguro donde dejar la bici. Así de simple.
Mientras no haya carriles desagregados, esto es, claramente delimitados, señalizados y separados de los carriles para el coche o el bus, el usuario “urbanita tipo”, que no es un verdadero ciclista, sino que entiende la bici como una solución de movilidad, no sentirá que está suficientemente protegido y seguro en las calles. Es así de sencillo y es muy lógico: cuando vas por un carril y pasa a tu lado un coche o un autobús que triplica tu velocidad y además, a escasos centímetros de tu vulnerable cuerpo, inmediatamente piensas algo: me estoy jugando la vida, y, sinceramente, no merece la pena mientras las circunstancias no cambien. Y eso, lo digo por experiencia propia.
Así que, aunque a todo ese público le encantaría usar la bici a diario, no dan el paso por miedo y por ello continúan utilizando el metro, bus o coche a diario.
Vamos a cerrar los ojos y a soñar por un momento: los carriles desagregados son una realidad, y las principales ciudades cuentan con ellos de manera generalizada. Y, además, supongamos también que se ha trabajado simultáneamente en campañas de concienciación para ello y las administraciones públicas han concedido enormes ayudas para la compra de ebikes urbanas.
Ya hemos superado el primer gran obstáculo. ¿Cual es el siguiente? También es muy sencillo de entender: ¿dónde dejo la bici al ir al trabajo? Si dejas una bici en la calle, ya sabemos lo que pasa con los amigos de lo ajeno. Y si es una bici eléctrica, ni se nos pasa por la imaginación.
O bien se crean enormes parkings vigilados para bicicletas al estilo de los países nórdicos que tanto admiro en muchos aspectos, o bien las empresas que se lo puedan permitir, deben crear espacios vigilados y regulados donde sus empleados dejen las bicis con seguridad, y si hay enchufes para cargar las ebikes, mejor que mejor.
Parkings y empresas comprometidas
Sin lugar a dudas, lo mejor y más necesario sería las 2 soluciones a la vez: parkings y empresas comprometidas.
Lo de los parkings públicos lo veo factible, siempre y cuando haya voluntad para ello. Pero lo de los espacios en las empresas, no es que no lo vea posible, es que, seamos sensatos, es mucho más complicado, en un país donde abundan las Pymes y no es nada fácil ponerlo en práctica por una cuestión física: el espacio disponible.
El primer condicionante, los carriles, está en manos de la administración pública, mientras que el segundo, el espacio vigilado, está en manos de ambas: bien los parkings públicos (pues los privados no lo veo rentable) o bien los espacios en las empresas.
Pero esto, lo tengo muy claro: hasta que esos 2 sencillos condicionantes no cambien de verdad (disponer de carriles bici segregados y contar con lugares seguros donde poder dejar tu bicicleta), me atrevo a aventurar que no se producirá una verdadera revolución en las ciudades que aún no han explotado en el uso de la bici urbana.
Y hasta cierto punto es lógico: ¡el miedo a ser atropellado o robado, es libre!
Muy bien la reflexión Angel. Me gusta.
Conozco muy bien Madrid, Valencia, Málaga y Vitoria en Bici. Explico: Me lo conozco muy bien porque he visitado todas estas ciudades en bicicleta con Cristina, mi mujer. Cristina aprendió “tarde” a usar una bici, no es atrevida, no tenía “cultura previa” de bici. En Vitoria, hemos visitado la ciudad por completo sin problema, ni contratiempos. Igual en Valencia. En cambio, en Madrid, ella se paraba cada cinco minutos por miedo. Es a tal punto que ya no quiere ir… Entonces pienso que no es un problema de cultura ciclista. En Madrid, opino que la estrategia política vigente y generalizada es imposibilitar y obstaculizar de manera sutil la movilidad en bicicleta. Supongamos que un ciclista como yo en Madrid (no tengo miedo o por lo menos me defiendo en
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Buena reflexión.
Añadiría varias cosas, la primera es que el móvil está chupando la energía a los seres humanos, que son vagos por naturaleza, para que vas a esforzarte en pedalear pudiendo ir en un cabify mientras ves vídeos de TikTok?
Respecto al aparcamiento, necesitan en casa también. Vaticino que en el futuro muchas plazas de parking se enjaularán y albergarán unas cuantas bicis seguras donde antes había un solo coche!
Del aire que toca respirar…. ya tal jajaja
Un abrazo
Eso es. Hay quien minimiza ese impacto negativo, pero es despreciable.
¿ soy el único que piensa que si no nos movemos en bici es por pura pereza ? veo coches estacionados en doble fila, sobre pasos de peatones, delante de vados, etc solo por no caminar un metro de mas ¿ como les vamos a pedir a esa gente que se mueva en bici ?
Tal cual, es un tema de energía, prefieren ahorrar