Este informe realizado por la ECF ofrece una visión global del estado de las estrategias nacionales para el uso de la bicicleta en 44 países europeos.
Según el objetivo político fijado por el ‘Plan Director Paneuropeo para el Fomento del Uso de la Bicicleta’, todos los países deben elaborar y aplicar una estrategia nacional para el uso de la bicicleta de aquí a 2030. El Plan Director se adoptó en mayo de 2021 y se aplica a 54 países.
La ECF (European Cyclists’ Federation) ha publicado el informe ‘El estado de las estrategias nacionales para el uso de la bicicleta’.
14 de los 44 países analizados cuentan ya con una estrategia de la bicicleta nacional en vigor, mientras que ocho están en proceso de desarrollar una por primera vez.
“Nuestro análisis muestra que las estrategias nacionales para el uso de la bicicleta están ganando protagonismo, pero que aún queda mucho camino por recorrer en muchos países”, aseguran desde ECF.
Las principales novedades del informe son:
• Italia adopta su primera estrategia nacional para el uso de la bicicleta.
• Inglaterra publica su segunda estrategia de inversión en ciclismo y marcha a pie.
• Francia publica un nuevo Plan para el uso de la bicicleta y la movilidad activa 2022-2027.
• República Checa adopta un Concepto de Movilidad Urbana y Activa 2021-2030.
• Luxemburgo adopta un nuevo Plan Nacional de Movilidad 2035 con una sección dedicada a la bicicleta.
En lo que se refiere a España, adoptó en 2021 su primera estrategia nacional para el uso de la bicicleta. Se trata de la Estrategia Estatal por la Bicicleta, impulsada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que se presentó bajo el lema ‘Efecto bicicleta: cuando te sumas, todo rueda’ e intenta transmitir que la bicicleta en España puede contribuir a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.
Además, el Gobierno anunció recientemente la creación de un Grupo de Trabajo Interministerial con la finalidad de coordinar las políticas públicas relacionadas con la movilidad ciclista en España.
20 países han adoptado en algún momento una estrategia nacional para el uso de la bicicleta o un documento político similar.
Como se ha adelantado anteriormente, 14 países cuentan con una normativa en vigor, mientras que en seis ha expirado y, por tanto, necesitan actualizarse.
De los 24 países restantes analizados en el informe, ocho se encuentran actualmente en proceso de desarrollar por primera vez una estrategia nacional para el uso de la bicicleta, situados principalmente en la región del Danubio.
Además, siguen existiendo grandes lagunas en algunas partes de Europa Central y Oriental, los Balcanes y el Cáucaso.
Inversión para promover la bicicleta
Según este análisis, la región septentrional de Bélgica y Flandes ha sido el principal inversor en infraestructuras ciclistas en 2022, con una inversión aproximada de 45 euros per cápita, seguida de Irlanda (unos 35 euros) y Noruega (unos 20 euros). Anualmente, las autoridades regionales flamencas invierten unos 300 millones de euros en la bicicleta.
Según Fietsberaad Vlaanderen, centro de conocimiento que promueve el uso y y políticas destinadas a la bicicleta en Flandes, las ciudades invierten anualmente una media de 15-20 euros per cápita en la bicicleta. Es decir, tres veces más que hace cinco años. Flandes también absorbe la mayor parte de la inversión de 411 millones de euros destinada al ciclismo como parte del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia de Bélgica.
“Aunque la bicicleta es el modo de transporte más eficiente desde el punto de vista climático y energético por excelencia, aún no ha recibido la atención que merece en las distintas políticas climáticas y energéticas. Por ello, desde la ECF insistimos en la necesidad de tener plenamente en cuenta el potencial de la bicicleta e incluir sistemáticamente medidas al respecto tanto en las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional de la ONU como en los Planes Nacionales de Energía y Clima de la UE”.
