El decreto de ahorro energético aprobado por el Congreso ha entrado en vigor. Entre las medidas se recogen ayudas al transporte público, pero no se ha mencionado a la bicicleta. Desde AMBE aseguran que se trata de una “oportunidad perdida” para apostar por este medio alternativo y sostenible.
El nuevo plan de ahorro se prolongará hasta noviembre de 2023 y recoge diversas medidas de sostenibilidad económica acordadas con la Comisión Europea, que tienen el objetivo de reducir el consumo energético.
En el ámbito del transporte, se ha hecho efectiva la gratuidad de los trenes de Media Distancia, Rodalies y Cercanías de septiembre a diciembre, al mismo tiempo que los títulos multiviaje de los servicios de AVANT tendrán un 50 % de descuento. Además, los autobuses de la EMT de Madrid serán gratis los días 1, 7 y 8 de septiembre y se aplicará una tarifa de descuento a los abonos de 30 días, tarjetas de 10 viajes y tarjeta azul. Todo ello para animar a la ciudadanía a que se desplace en transporte público.
Sin embargo, el decreto no menciona a la bicicleta ni incluye ninguna medida para promover su uso, hecho que desde AMBE (Asociación de Marcas y Bicicletas de España) consideran como una “oportunidad perdida” para este medio alternativo y sostenible.
“La bicicleta representa la independencia energética, ya que no necesita ningún tipo de combustible y ayudaría a reducir la inflación. También podría facilitar el acceso y desplazamiento a las estaciones de metro o trenes dadas las nuevas medidas, por ejemplo. Y, sin embargo, no se le ha dado importancia en este Decreto Energético”, expone Jesús Freire, secretario general de AMBE.
Freire asegura que antes de aprobarse el decreto ya enviaron sus propuestas a los respectivos ministerios, aunque cree que el problema es la “inercia histórica” que arrastra España.
“En España siempre se ha relacionado a la bicicleta con el deporte y cuesta cambiar esa cultura, no se piensa en la bicicleta como transporte. Las instituciones deben invertir en infraestructuras ciclistas, aparcamientos y se deberían ofrecer incentivos para la compra de bicicletas como lo hacen en otros países. Sorprende que en España te den ayudas para comprar un coche menos contaminante, pero no haya ayudas para adquirir una bicicleta”, expone.
Medidas que solicita AMBE
AMBE solicita la inclusión de medidas concretas para fomentar el uso de la bicicleta y así puedan contribuir a paliar la inflación, reducir el gasto energético y mejorar la situación económica de las familias.
Para ello, AMBE plantea:
- Dotación de ayudas a los ayuntamientos para la construcción de redes de carriles bici y aparcamientos de bicicletas.
- Dotación presupuestaria para la implementación de la Estrategia Estatal por la Bicicleta
- Ayudas a la compra de bicicletas y bicicletas eléctricas, tanto para particulares como empresas.
- Incentivos fiscales para que las empresas puedan dotar de flotas de bicicletas a sus empleados, como en Francia.
- Reducción del IVA para la compra de bicicletas, componentes, accesorios, así como para el alquiler y reparación de bicicletas.
- Bonificación del 50 % en los abonos de alquiler de bicicleta pública, a semejanza de otros sistemas de transporte (bus, metro, tranvía y cercanías).
